
Pasar su tiempo de ocio acompañado con los videojuegos se ha convertido en la norma para los niños y los adolescentes, en menoscabo del tiempo que pasan al aire libre. Los ordenadores, las Xbox y los dispositivos portátiles facilitan jugar en cualquier momento y lugar.
Muchos padres se alegran del respiro que suponen los videojuegos, y regalar un videojuego a un niño no debe ser visto como algo negativo. Pero también es cierto que no hay nada saludable en pasar todo el día jugando delante de las pantallas.
Las señales de adicción a los videojuegos comienzan a ser evidentes cuando los niños y adolescentes empiezan a descuidar otras áreas de su vida para jugar a los videojuegos.
Si como padre estás preocupado de que tu hijo pueda estar pasando demasiado tiempo jugando, aquí tienes 10 signos o señales de adicción a los videojuegos que deberías tener en cuenta y saber reconocer.
Señales psicológicas de la adicción a los videojuegos
No dejes que la adicción a los videojuegos afecte al bienestar de tu hijo. Conoce los signos psicológicos que indican el comienzo de una dependencia.
Cambios de humor
Un niño (o adolescente) que pasa de estar de mal humor a sentirse tranquilo y relajado cuando juega a los videojuegos puede estar mostrando señales de adicción a los videojuegos. Con el tiempo, un niño puede empezar a recurrir a los videojuegos como una forma de hacer frente a los problemas de la vida.
Síntomas de abstinencia
Cuando se le impide jugar a los videojuegos o no puede hacerlo, el niño experimenta sentimientos de ira y frustración, al igual que un adicto a la comida o un jugador experimenta el síndrome de abstinencia cuando no puede comer o jugar.
Preocupación por los videojuegos
La preocupación por una actividad es un signo clave de cualquier forma de adicción. Los niños que comen, beben, duermen y hablan de videojuegos cuando no están realizando la actividad se han preocupado u obsesionado con ella.
Signos físicos de adicción a los videojuegos

Mala higiene personal
Como ocurre con cualquier adicción, los adolescentes se pierden en la actividad hasta el punto de descuidar incluso las tareas diarias más esenciales. Con el tiempo, el adolescente dedicará menos tiempo a su aspecto y a su limpieza en general.
Problemas físicos
Horas y horas de jugar a los videojuegos inevitablemente hacen mella en el cuerpo; incluso en el de un niño o adolescente. La fatiga visual produce sequedad o enrojecimiento de los ojos.
Otras señales de adicción a los videojuegos son las lesiones por estrés repetitivo, como el síndrome de túnel carpiano que causa entumecimiento de los dedos. Las quejas de dolores de cabeza, cuello y espalda también pueden empezar a producirse con frecuencia.
Señales de comportamiento de la adicción a los videojuegos
Disminución del interés por el rendimiento escolar
Como ocurre con cualquier comportamiento adictivo, cuanto más se entrega una persona a una actividad adictiva, más quiere entregarse a ella. En estas circunstancias, es inevitable que el interés por el trabajo escolar comience a disminuir.
Pérdida de interés por otras actividades
Cuando se trata de videojuegos, los niños (o adolescentes) propensos a la adicción pasarán cada vez más tiempo a los mandos del juego. Las actividades que antes disfrutaban comenzarán a ser abandonadas a medida que la adicción a los videojuegos se afianza.
Aumento de la agresividad
Cualquiera que intente limitar o impedir que el niño juegue se encuentra con hostilidad y/o agresividad.
Señales de relación de la adicción a los videojuegos

Aislamiento de los amigos y la familia
Un niño adicto a los videojuegos querrá pasar cada vez menos tiempo con sus amigos y familiares. Para algunos el aislamiento excesivo puede indicar que existe un problema emocional subyacente, como la depresión.
Conflictos con los demás.
Cuando se enfrenta a la cantidad de tiempo que pasa jugando a los videojuegos, el niño mentirá, culpará a los demás o se volverá discutidor. Con el tiempo, las relaciones con los amigos y la familia empiezan a resentirse.