Sin importar el tipo de celebración que estés organizando, todas tendrán un punto común: la mesa para tus invitados. Este será el lugar por excelencia donde los asistentes podrán compartir, conversar, y hasta descansar después de bailar. La decoración es imprescindible, y escoger la adecuada es fundamental, por eso hoy veremos centros de mesa para Primera Comunión que darán originalidad al evento.
Celebración Primera Comunión
Una vez que los pequeños reciben el sagrado sacramento, es cotidiano hacer una pequeña reunión en la que familiares y amigos celebran este momento. La decoración en general suele usar colores pasteles y blanco por excelencia. El uso de símbolos religiosos como crucifijos, rosarios, hostias, entre otros es lo más apropiado, sin embargo, no hay que ser tan literal en todo a la hora de decorar.
Los centros de mesa para Primera Comunión serán por si solos un objeto que embellecerá el lugar, y si quisieras podrían a su vez algún tipo de utilidad. Recuerda que practicidad y simplicidad hacen que la elegancia sea más fácil de llevar.
Centros de mesa para Primera Comunión
Esta celebración puede tener el estilo que quieras siempre y cuando se mantenga el respeto y formalidad en los detalles que escojas. Por eso, podrás tener elementos modernos, vintage, formales, elegantes e incluso con una temática determinada como recientemente se está haciendo. Tú decides, claro tomando en cuenta siempre la opinión y gustos de tu pequeño, la clave en cualquier celebración siempre será incluirlo en las decisiones.
Evidentemente dependiendo del sexo de tu pequeño los detalles serán totalmente diferentes, así que comencemos con algunas pautas para decorar los centros de mesa para Primera Comunión.
Para niñas:

- El uso del rosa, amarillo o lila pastel combinado con blanco o champagne está totalmente acorde a la ocasión.
- Puedes optar por usar cilindros de vidrio de pequeña altura para combinar flores y globos, con una cinta alrededor que tenga en el centro un crucifijo hecho del material que quieras (madera, acrílico, cerámica…).
- Pequeñas macetas de arcilla pintadas de blanco, pueden ser útiles como base para colocar suspiros alrededor y decorar con un bello ángel en un palito de altura, o el símbolo de la comunión impreso con espigas de trigo abajo en la base.
- Prueba combinando velas flotantes en cilindros con agua puestas en una base de madera con flores y uvas (naturales o artificiales).
- ¿Buscas algo sencillo de hacer? Otra opción sería un maceta de cristal, con piedras acrílicas azules y a modo de “flor” alguna figura impresa o de papel que puede ir desde ángeles infantiles, hasta figuras como molinillos.
Para niños:

- Sin duda, la paleta de colores será azul pastel, azul marino o rey, amarillo y verde pastel junto con blanco perla. Esos serían los colores más adecuados y en tendencia.
- El uso clásico de velas de diferentes tamaños finamente decorados y agrupados en parejas con alturas distintas te permitirá ser tan original como tu imaginación lo permita.
- Asemejar nubes y ángeles es una combinación delicada y sutil. Podrías usar esferas de polietileno con algodón desordenado, y ángeles en 3D (pueden ser impresos en cartulina por ambas caras). Todo esto sobre una base cuadrada natural o pintada del color que prefieras.
- Un uso de peluche pequeño junto a una maceta con flores blancas y azules también podría ser una linda opción fuera de lo habitual.
Decorar los centros de mesa para Primera Comunión no tiene que ser una tarea difícil. Solo hay que combinar los elementos correctos y hacer uso de materiales delicados que inspiren esa pureza que representa el sacramento de la comunión.