La celebración del sacramento de la Primera Comunión es un hito importante para los niños y también para sus padres. Una vez culminado el acto ceremonial es común hacer un pequeño festejo para compartir entre familiares y amigos. Ésta no debe ser monótona y de temas aburridos sobre todo para tu peque, por eso podemos aprovechar su afición por los deportes y hacer una comunión futbolera digna del rey de la casa.
Comunión Futbolera
De seguro te preguntarás si es impropio combinar el futbol y la religión, pero ¿no lo sería también en el caso de las chicas cuando usamos flores y elementos shabby chic? Y es que la decoración de este tipo de eventos para niños se ve muchas veces restringida por los parámetros sociales.
Pero tranquila, ya verás cómo puedes jugar con ambas cosas, sin dejar a un lado el carácter religioso y ceremonial que exige el evento. El resultado final será un espacio totalmente original que hará feliz a tu hijo y sin duda, será una idea original que tus invitados adorarán.
¿Cómo decorar una comunión futbolera?

- Podemos comenzar por las invitaciones. Puede ser muy creativo de vuestra parte que en las tarjetas que se darán a los invitados no esté el típico ángel, sino un niño vestido para su Primera Comunión, pero en posición de jugar con un balón de fútbol, y el símbolo del sacramento cerca de él. Hay opciones para realizar invitaciones y recordatorios personalizados para estas ideas originales.
- La paleta de colores que escogerás deberá ir acorde con el equipo de preferencia de peque, pero recomendamos que sea lo más neutro posible para no restarle importancia al evento y se convierta en una simple fiesta. Así que opta por colores como el azul y blanco, con las típicas figuras de balones de fútbol en blanco y negro.
- Los detalles fútbol no deben ser predominantes o abundantes, sino más bien pocos y estratégicamente llamativos. Úsalos en la mesa de dulces, como por ejemplo con cakepops en forma de balón o galletas con el mismo motivo.

- Los centros de mesa pueden combinar globos en color blanco perla y si consigues en forma de balón sería ideal. Así ambos pueden estar atados a una base clásica en vidrio, madera o acrílico que tenga el símbolo de la cruz con espigas de trigo a los lados. Toda una comunión futbolera sin lugar a dudas.
- El pastel como elemento central debería mantener la línea clásica de toda comunión, colores pasteles, símbolos religiosos de acuerdo a la ocasión y si hay oportunidad hacer a medida un pequeño niño con alas, y un balón de futbol, con su número y apellido en la parte trasera de la camiseta.
- Y el toque final lo podrás dar colocando (de ser posible claro) una pequeña cancha de fútbol para que tu pequeño y sus amigos se diviertan mientras que los adultos conversan y tratan otros temas.
Como ves, lo tradicional no pierde valor cuando lo combinas con elementos originales como el fútbol. Por eso, atrévete, confía en tu buen gusto y haz de esta comunión futbolera un momento inolvidable