
Llegó la primavera, y para muchos alérgicos empiezan las preocupaciones. Esta es también una época en que muchos aprovechan para limpiar sus hogares, algo que siempre se recomienda para reducir los alérgenos presentes en casa.
Hemos hablado previamente sobre las alergias alimentarias más comunes, pero hoy nos enfocaremos en cómo prevenir el tipo de alergias por contacto.
Aunque la limpieza regular es una parte importante de un plan de control de alergias, también es cierto que el acto de limpiar -especialmente si no se ha hecho en mucho tiempo- puede desencadenar los síntomas de la alergia, ya que el polvo y otros alérgenos se agitan.
En este artículo te daremos algunos consejos de limpieza para personas alérgicas, además te sugeriremos las mejores herramientas y técnicas para evitar exponerte a productos químicos que puedan provocar más alergias.
Las mejores herramientas de limpieza para reducir los alérgenos
Una aspiradora equipada con un filtro de partículas de alta eficiencia, es la mejor herramienta de limpieza para personas alérgicas. En el caso de las aspiradoras sin bolsa, limpie y lave regularmente el vaso de recogida.
Existen aspiradoras equipadas con luz UV desinfectante, para eliminar ácaros y bacterias. Este tipo de aspiradora puede usarse para limpiar alfombras, cortinas y cualquier tejido en general.
Los paños y fregonas de microfibra atraen el polvo mejor que el algodón o las toallas de papel. Humedece ligeramente las mopas y los paños de limpieza antes de utilizarlos para atraer la mayor cantidad de polvo.
Con respecto a la protección personal, opta por mascarillas desechables o lavables. Evita los guantes de látex y elige en su lugar guantes de goma forrados de algodón para evitar la irritación de la piel.
Selecciona detergentes y otros productos quitamanchas sin tinte y sin perfume. Los estudios han demostrado que el tinte suele ser el culpable de la irritación de la piel.
Los mejores productos de limpieza para reducir los alérgenos

Por desgracia, algunos productos de limpieza pueden ser realmente irritantes y causar los mismos síntomas que un alérgeno. Busca productos de limpieza que contengan el menor número posible de sustancias químicas.
Es especialmente importante limitar tu exposición a los productos que incluyen: Amoníaco, D-limoneno, Formaldehído, Hipoclorito de sodio y Lauril sulfato de sodio. Estas sustancias químicas han sido identificadas como potencialmente irritantes.
Aprender a leer las etiquetas es crucial en lo que tiene que ver con la limpieza para personas alérgicas, tanto si se trata de productos de lavandería, limpieza o si se quiere quitar una mancha.
Prefiere los productos sin perfume y prueba opciones naturales como el vinagre blanco destilado, el bicarbonato de sodio y el zumo de limón para la limpieza.
Consejos para reducir los alérgenos en toda la casa
A los ácaros del polvo y las esporas del moho les gusta el calor y la humedad. Manteniendo una temperatura entre 20˚C y 22˚C y un nivel de humedad no superior al 50 por ciento puedes reducir su crecimiento.
Utiliza filtros de partículas pequeñas en los sistemas centrales de calefacción y refrigeración y en los acondicionadores de aire de las habitaciones. Cambia o limpia los filtros mensualmente.
Es muy importante controlar cualquier plaga dentro del hogar, como insectos o ratones. Utiliza trampas o un exterminador profesional y sella cualquier grieta que pueda permitirles entrar en la casa.
Elimina el desorden en los espacios habitados, ya que actúan como colectores de polvo, Además, no permitas que se fume en ninguna parte de la casa.
Los sótanos y los almacenes pueden ser húmedos y polvorientos. Si utilizas estos espacios para el almacenamiento, utiliza cubos de plástico con tapa para evitar que los objetos de colección acumulen polvo y se forme moho.
Si detectas humedad, usa un deshumidificador para extraer la humedad del aire. Comprueba si los cimientos y las ventanas tienen fugas y repáralas lo antes posible. Deshazte de la moqueta e instala un suelo de superficie dura que pueda limpiarse fácilmente.