
Entre los dibujos animados, las consolas de videojuegos, las tabletas y los teléfonos inteligentes hay muchas razones para que los niños se queden en casa con los ojos pegados a un dispositivo electrónico.
Hoy en día, parece que hay menos razones para que los niños salgan al aire libre o incluso quieran hacerlo. Puede ser difícil convencer a los niños de que dejen sus dispositivos en favor de las interacciones sociales en persona o simplemente para sacar al perro a pasear.
Pero no se trata sólo de conseguir que los niños tomen un poco de sol o aire fresco porque pensemos que puede ser bueno para ellos; hay beneficios reales y cuantificables que los niños reciben al pasar más tiempo al aire libre.
Beneficios de pasar más tiempo al aire libre
Por supuesto, no es más fácil convencer a un niño de que juegue al aire libre si le dices que puede tener un menor riesgo de padecer enfermedades cardíacas dentro de 30 años.
Pero si se pueden crear espacios acogedores y actividades divertidas que hagan que quieran salir al exterior. Esta es una lista breve de los muchos beneficios que los niños reciben al pasar tiempo al aire libre:
- Aumento de la forma física
- Reducción del riesgo de obesidad
- Disminución del riesgo de miopía
- Reducción de los síntomas del TDAH
- Mejores resultados en los exámenes estandarizados
- Menores niveles de estrés
- Mejora de las habilidades sociales
5 formas de hacer que los niños pasen más tiempo al aire libre
En primer lugar, termina con las las excusas de tu parte. Con el simple propósito de que los niños salgan más al aire libre, puedes sacar tiempo para llevar a tus hijos a parques, zonas de recreo, lagos o la playa con más frecuencia.
Además, puedes crear espacios en casa que quizá no sean el equivalente a un bosque lleno de vida salvaje, pero que seguirán siendo mucho mejores que si están encerrados viendo una pantalla.
Espacios de juego atractivos
Una de las formas más sencillas de animar a los niños a pasar más tiempo al aire libre es hacer que los espacios sean más atractivos. Esto puede significar la compra de una estructura de juego, la instalación de un muro de escalada para niños o la colocación de juegos de feria en el patio.
Observar la vida silvestre

Conseguir que los niños se interesen por la observación de aves o de la vida silvestre puede ser un buen primer paso. Sobre todo, porque puedes incorporar su dispositivo electrónico favorito para buscar información sobre las diferentes especies, o para hacer fotos.
Plantar su propio jardín
Involucrar a los niños y a los adolescentes en la jardinería es una forma estupenda de que salgan al aire libre y de enseñarles de dónde vienen los alimentos, cómo cuidar de los seres vivos y cómo cultivar su propia comida.
Céntrate en cultivar cosas fáciles al principio, como tomates o flores silvestres, para despertar su interés.
Fiestas y juegos al aire libre
Estudios y encuestas han revelado que 9 de cada 10 niños pasarían más tiempo al aire libre si un amigo les animara a hacerlo. Por lo tanto, invitar a otros niños a jugar y a celebrar fiestas al aire libre puede animar a tus hijos y a los invitados a pasar más tiempo al aire libre.
Además, es más fácil que los niños salgan al aire libre cuando tienen otros niños con los que interactuar y actividades en las que participar.
Los adultos deben también pasar más tiempo al aire libre

Hoy en día, no sólo los niños pasan más tiempo dentro de casa. Los adultos también están pegados a sus ordenadores y dispositivos.
Nuestras apretadas agendas rara vez dejan tiempo para disfrutar del aire libre con un buen libro o pasear a nuestros perros con la frecuencia que nos gustaría. Por ello, hemos normalizado el hecho de pasar la mayor parte del tiempo dentro de casa.
Hasta hemos convertido en una ocasión especial cuando hacemos una barbacoa o una fiesta al aire libre. Esto es lo que ven nuestros hijos, así que les parece normal quedarse todo el día entre cuatro paredes
Para conseguir que los niños salgan al aire libre, tenemos que normalizar esta actividad para que la vean como parte de la vida diaria.
Para conseguirlo, hay que crear espacios en los que quieran pasar tiempo, y empezar a usarlos con y sin tus hijos. Ellos te verán, y de seguro será más efectivo tu ejemplo que tus buenas intenciones.