
Nuestro mundo ha cambiado drásticamente en los últimos meses, y nos vemos obligados a hacer cosas que antes eran impensables. Usar máscaras faciales o mascarillas cada vez que nos exponemos al contacto con otras personas es posiblemente lo primero en la mente de la mayoría.
En España toda persona mayor de 6 años debe usar correctamente una mascarilla en público. Como con cualquier rutina nueva, con los niños esto es más fácil de decir que de hacer. Usar mascarillas es una experiencia inusual y los niños pueden resistirse a cooperar al principio.
Debido a que los niños se acostumbran a las cosas nuevas a través de la exploración, pueden querer tocar la máscara cuando está en su cara. Además, es posible que tengan una reacción negativa a las mascarillas.
Sea como fuere, en PiccolaFesta te ofrecemos algunos consejos para ayudar a los niños a usar mascarillas. De esta forma podemos les facilitaremos el proceso de acostumbrarse a usarlas siempre que estén en una situación que lo amerite.
Explicar en forma sencilla la razón de usar mascarillas
Los niños quieren saber siempre por qué hacen las cosas. Debes ayudarlos a comprender que llevar correctamente una mascarilla es un acto de bondad para con los demás, evitando propagar gérmenes y recibiendo el mismo trato del resto de las personas.
Reconocer sus frustraciones

Los niños están frustrados por el impacto que el coronavirus ha tenido en sus vidas. Desde hace varios meses no han asistido a la escuela y la mayoría de su contacto social fuera del grupo familiar es a través de la tecnología.
Poner una barrera con los demás, como una mascarilla, puede aumentar la frustración y la ansiedad hacia las interacciones sociales en persona. Para ayudar a los niños a usar mascarillas es muy útil reconocer y normalizar estos sentimientos.
Empezar su uso dentro de casa, como una actividad
El mejor momento para la primera práctica es cuando todos están bien descansados, bien alimentados y de buen humor. Será más fácil para todos tener una experiencia positiva con la práctica cuando estén en la mentalidad correcta.
Permíteles tocar, oler y sostener las mascarillas en sus manos, para que se habitúen al objeto. Enséñales cómo se pone y se quita con seguridad. Puedes encontrar miles de vídeos que te enseñaran la técnica correcta.
Mantener el refuerzo positivo

Felicítales por practicar y mantener la mascarilla puesta durante más tiempo. Una vez que se sientan más cómodos con la mascarilla puesta, hagan cosas divertidas mientras lo hacen.
Pinta con ellos, realiza alguna actividad recreativa o lee sus libros favoritos. Los niños más pequeños pueden divertirse poniendo máscaras en sus muñecas o peluches. Habituarse al uso en casa en estos contextos positivos puede ayudar a los niños a usar mascarillas en público.
La distracción les ayudará a ignorar algunas de las sensaciones desagradables que puedan sentir al usarla, como el aliento cálido y húmedo y la tensión alrededor de la cara.
Ser un modelo a seguir
El mejor consejo para ayudar a los niños a usar mascarillas es practicar lo que predicas. Los padres pueden dar un buen ejemplo utilizando las mascarillas también. Cuanto más positivos y tranquilos nos veamos, más probable será que los niños nos imiten.