
Afrontémoslo, el primer año de la vida de un bebé es un desafío, por no decir más. No solo se trata del shock de dar a luz a un pequeño ser humano, sino lo que sigue. El agotamiento, la inseguridad, las noches de insomnio y, en resumidas cuentas, el cambio.
Entonces empiezan a moverse por sí mismos y se abre todo un mundo de peligros potencialmente fatales. Desde las escaleras a los enchufes, hasta ese pequeño trozo de plástico que intentan tragarse.
Por eso cuando llegan al primer año, definitivamente es algo que vale la pena celebrar. Muchos padres evitan celebrar la primera fiesta de cumpleaños del niño, afirmando que el bebé no lo recordará. Pero es que la fiesta no es para él o ella, sino que la mereces tú.
Celebrando la vida
Aunque a tu pequeño le encantará el pastel y los globos y el alboroto de una fiesta, vale la pena recordar que en pocos años todo será diferente. Tendrás la casa llena de niños que gritan en frenesí por el azúcar.
¿Por qué no hacer que esto se trate de ti y de tu familia y amigos que han ayudado a hacer este año un poco más fácil? Lo maravilloso de que tu bebé sea demasiado pequeño para dar su opinión es que sólo puedes invitar a niños y padres con los que disfrutas de tu tiempo.
Esto lleva a una primera fiesta de cumpleaños mucho más relajada y agradable. Hay, sin embargo, algunas reglas de oro sobre la organización de una fiesta para niños muy pequeños.
Consejos para la primera fiesta de cumpleaños

Los cinco consejos más importantes para una primera fiesta de cumpleaños:
- Asegúrate de que la hora normal de la siesta de tu bebé siga siendo la misma. Un niño de un año demasiado cansado o demasiado excitado no contribuirá al ambiente.
- Si invitas a otros niños de un año, tal vez consideres limitar el tiempo de la fiesta a un par de horas. Eso puede ser suficiente para la mayoría de los niños, y quizás algo más que suficiente para la paciencia de sus padres y la tuya.
- Crea una «zona segura para bebés» con un par de mantas en el suelo y barreras para evitar cualquier fuga. Pon algunos juguetes dentro y algunas sillas en el exterior para que los adultos y los pequeños puedan jugar mientras los grandes conversan, o viceversa.
- Un picnic en la «zona segura para bebés» puede ser la forma más fácil de alimentar a los asistentes a la fiesta. Una buena forma de servir la comida es en pequeños vasos de papel, fáciles de sostener para los niños y fáciles de reciclar después.
- Tal vez el mejor consejo es mantenerlo simple para no abrumar al bebé y agotarse. Dicho esto, si lo tuyo es planear fiestas, deberías organizar una primera fiesta de cumpleaños, ¡sólo se hacen una vez!
Actividades en la primera fiesta de cumpleaños

Aunque algunos niños serán demasiado pequeños para los juegos tradicionales, puedes preparar para ellos algunas actividades. Los globos normales pueden constituir peligros para la asfixia, pero los hinchados con helio pueden dar un efecto encantador.
Una piscina infantil llena de pequeñas bolas de plástico puede hacer las veces de una piscina de bolas. Además, las burbujas y el Play-Doh son una gran combinación.
Una idea encantadora para los adultos que asistan a la fiesta es un juego de la cápsula del tiempo. Pide a los asistentes a la fiesta que escriban un mensaje que el pequeño pueda leer en el futuro. Esto, junto con algunas fotos de la fiesta, puede llegar a ser un apreciado objeto familiar.
Lo más importante es asegurarse de tomarse el tiempo para celebrar la primera fiesta de cumpleaños. Cuando pasen de ser bebés a niños pequeños, aprenderán y se desarrollarán de muchas maneras, se harán más independientes y comenzarán a abrirse camino en el mundo.