Érase una vez que los padres y los hijos se levantaban por la mañana, desayunaban y se iban al trabajo o a la escuela. Así eran las cosas, todos nos acomodábamos a nuestras rutinas y la vida seguía, más o menos igual, día tras día.
No era perfecto, seguro, pero era una rutina que funcionaba. Sin embargo, desde que la pandemia de coronavirus cambió las reglas, la gente se queda trabajando desde casa o no trabaja, educando a sus hijos y manteniendo el distanciamiento social.
Aún ahora, a las puertas del invierno, muchos niños no están asistiendo a clases todos los días. Muchas de sus clases se toman virtualmente y prácticamente todas las guarderías siguen cerradas. Y en el período de fin de año ésta será una situación generalizada.
Debido a esto, los padres tienen que cuidar y educar a sus hijos en casa mientras hacen malabares con el trabajo. Y esta falta de cuidado de los niños ha dejado a muchos padres abrumados.
Sin embargo, la industria del cuidado de los niños ha evolucionado para satisfacer las necesidades cambiantes de la gente en tiempos de pandemia. En este artículo descubrirás si la respuesta a tus preocupaciones se resuelve con una niñera virtual.
¿De qué se trata el cuidado virtual de los niños?
A diferencia del cuidado de niños tradicional, en el que alguien está físicamente presente con su hijo, el cuidado de niños virtual es un poco más práctico. Una niñera virtual se conecta a una plataforma de vídeo (como Zoom o Skype) y entretiene a tu hijo durante un tiempo predeterminado.
Algunas niñeras virtuales, dependiendo de la edad del pequeño, cantarán canciones, propondrán proyectos sencillos de artesanía o incluso pueden ayudarle en sus tareas. También pueden simplemente charlar con el pequeño, para que no se sienta solo.
Muchas de estas niñeras son artistas que no tienen trabajo y que han dado un giro a sus propias carreras a raíz de la pandemia. Si bien puede parecer extraño pagarle a un extraño para que pase tiempo en línea con tus hijos, puede ser la solución para muchos padres estresados.
El tiempo que pasan con una niñera virtual proporciona un momento de descanso, lo suficiente para completar una videoconferencia ininterrumpida o concentrarse en esos correos electrónicos que has estado tratando de escribir durante días.
Por ahora hay muchas más plataformas para el mundo anglosajón, pero poco a poco empiezan a surgir también en español, como por ejemplo Sitly.es.
Desventajas de una niñera virtual
Obviamente, las diferencias entre el cuidado de niños virtual y el tradicional son muy marcadas. No hay nada que impida que tu hijo de 4 años se aleje de la pantalla y haga lo que quiera mientras estás ocupado con el teletrabajo o descansando.
De igual modo sigues siendo el que hará la mayoría de las tareas en casa, recogerás el desorden de los niños y les darás algo de comer si lo piden.
Básicamente, lo que estás pagando es la posibilidad de un poco de tranquilidad y de que tu hijo obtenga algún tipo de aprendizaje de alguien que no seas tú, lo cual es una preocupación muy legítima en este momento.
Sin embargo, la supervisión de un adulto sigue siendo necesaria, especialmente para los niños más pequeños con períodos de atención más cortos.
¿Vale la pena contratar una niñera virtual?
El hecho de que algo esté disponible no significa que sea adecuado para todas las familias. Si los ingresos de la familia son aún más limitados que el tiempo, pagar a alguien para que charle por vídeo con tu hijo puede no ser una solución viable.
Tampoco si es probable que tu hijo se desconecte, dejándote una factura por una sesión de una hora que sólo duró 10 minutos.
Pero si tu hijo es una persona sociable, si es el tipo de niño que habla con cualquiera y le encanta la oportunidad de interactuar con cualquiera que se le cruce en el camino, puede que valga la pena echarle un vistazo a la posibilidad de contratar una niñera virtual.
Y sino, podría ser una mejor idea poner a los abuelos en la línea. Después de todo, probablemente lo harán gratis.
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