La primera comunión es uno de los eventos más importantes de la infancia si se pertenece a una familia católica. Ella fija la base de la vida espiritual de tu hijo. Por eso, es importante que su celebración sea inolvidable y reúna a sus seres más queridos. Esta no es una fiesta común, así que las actividades, los entremeses, la decoración; todo tiene que estar lleno de detalles.
¿Cómo lograr una Primera Comunión, íntima e inolvidable?
Hay algunas recomendaciones que no debes pasar por alto para que la fiesta sea una hermosa experiencia para tu familia:
Ten una lista de las cosas que no pueden faltar: Si quieres velas, recuerdos personalizados, stand para fotografías, cualquier detalle que consideres importante para tu familia, inclúyelo en la lista. Prioriza entre esos aspectos, hasta tener lo más importante para celebrar la primera comunión de tus sueños.
El lugar del festejo es importante: para conseguir una comunión íntima y solo con los familiares y amigos más allegados lo ideal es festejar en casa. Puedes decorar con unos cuantos globos y muchas flores naturales el jardín y añadir algunas luces navideñas o velas para lograr un ambiente acogedor. No olvides decorar las mesas con un angelical centro de mesa.
- Si quieres festejar fuera de casa un restaurante pequeño y elegante puede ser la opción ideal para un ambiente de privacidad en familia.
Define la lista de invitados: si quieres una comunión íntima, este es el punto álgido. Primero debes definir cuantas personas puedes recibir; ¿Sólo invitarás a la familia cercana y padrinos?, ¿compañeros de colegio?. Intenta que cada uno de los asistentes tenga un lazo especial con tu hijo.
Selecciona las actividades de la celebración: como se trata de una celebración infantil, puedes preparar dinámicas de grupo y juegos que le permitan a los presentes compartir y disfrutar recordando otros momentos importantes de la vida del festejado. Puedes elegir desde saltos de comba y carrera de sacos hasta juegos imprimibles.
El banquete: Los pequeños son los protagonistas, ellos prefieren siempre mini pizzas, empanadillas, sándwich, patatas fritas pasteles, dulces, que puedan tomarse con la mano y disfrutarse en unos pocos bocados. Para los adultos, puedes variar el menú; ofrece ensaladas, tortillas, lasaña, incluso puedes contratar un catering de comunión si tu presupuesto lo permite.

La invitación y el recuerdo: ya que la celebración de la primera comunión es a círculo cerrado, es una gran idea hacer invitaciones y recuerdos personalizados. ¡A mano, siempre es mejor! Dejará en el invitado el lazo de haber dedicado tiempo especial para hacer ese detalle y tendrá muchas ganas de estar allí. Las tarjetas de agradecimiento son un recuerdo sencillo y especial.

Libro de mensajes: esta idea me ha parecido genial. En un evento religioso donde están los seres más allegados, siempre habrá hermosas palabras, consejos y deseos. Será muy reconfortante leer en el futuro lo que tus invitados tengan que decir a tu pequeño este dia tan especial.
El pastel: Este es el protagonista de la fiesta. Será el centro de la mesa y el escenario perfecto para una buena fotografía. Elije un pastel llamativo sencillo, delicado, con aplicaciones que reflejen el evento que les convoca.

Si tomas en cuenta estos sencillos consejos, de seguro la celebración se adaptará a tu espacio, expectativas y presupuesto. La primera comunión, no tiene que ser motivo de estrés. Por el contrario, será una celebración reconfortante y llena de amor fraterno y familiar.